Cosas a tener en cuenta al hacer una reforma

Grupo Inviam 31/08/2021

Hacer una reforma es mucho más que elegir unos materiales y cambiarlos. Requiere planificación, pero si quieres no terminar frustrado y estresado por favor planifica lo máximo posible. Planifica desde el inicio hasta el final de la obra, desde la primera pincelada, hasta el ultimo tornillo. Todo es un largo proceso en el que intervienen muchos factores.

 

Cosas a tener en cuenta al hacer una Reforma

Decidir hacer una obra en tu vivienda habitual es un paso muy importante y que se suele hacer una vez en la vida, quizás alguna más si la experiencia no te ha resultado traumática.

Unas buenas preguntas que debemos hacernos antes de acometer nuestra reforma son el:

 

¿Cuándo?

 

¿Cómo?

 

¿Cuánto?

¿Cuándo?

Depende mucho de tu estilo de vida, del alcance de la obra y de las posibilidades que tengas para combinar ambas.

No es lo mismo vivir tu solo, que tener familia con la que compartes tu vivienda, y no es lo mismo que tus hijos sean pequeños y requieran tu atención, a que sean independientes.

En cualquier caso, cuanto más vacía de gente y muebles y objetos este la vivienda, mas fácil es hacer la reforma. Lo ideal es que no esté viviendo nadie, por eso se suelen hacer muchas obras de reforma en vacaciones, aprovechando que la vivienda esta vacía.

Para hacerla en verano, seguramente tengas que tomar la decisión a principio de año. El alcance de la misma, elección de materiales y  empresa o empresas con la que hacerla te va a llevar muchos meses, no lo dejes para el último momento: Insistimos, la clave es la planificación.

¿Cómo?

Las opciones son muchas, puedes contratar a un profesional que se encargue de todo, proyecto, materiales, obra, mudanza… o puedes hacerlo tú mismo.

Puedes vivir en casa durante la reforma si no es muy grande, o puedes trasladarte mientras dure la obra.

Puedes contratar a un equipo que englobe todos los profesionales necesarios o puedes ir contratando tú a los distintos equipos.

Los materiales puedes comprarlos tu directamente, en cuyo caso recuerda que son importantísimo las fechas en las que te los servirán. Otra opción es ir con tu contratista de confianza a los almacenes donde suele comprar.

¿Cuánto?

No solo es un ¿cuánto me costará? También es ¿Cuánto tiempo? ¿Cuánto aguantaré? ¿Cuánto sobrecoste?

¿Cuánto me costará?

Para el cuanto me costará te aconsejamos que siempre, siempre, siempre hagas caso a aquel anuncio de detergente de los 80 que se hizo tan famoso “Busque, compare, y si encuentra algo mejor…. Cómprelo” Así de fácil de decir, y muy difícil y laborioso de cumplir, ya que no solo es pedir varios presupuestos, es quedar con los profesionales, saber transmitir que es lo que quieres hacer y después para comparar, es fundamental que las partidas estén detalladas y puedas enfrentar cada partida de obra con las de los otros presupuestos, de nada sirven los precios cerrados a una sola unidad, ya que unos incluyen ciertos trabajos que otros no y después viene las sorpresas en forma de “eso no estaba incluido” y si de verdad no estaba incluido es lógico pagarlo, pero en tu estimación de gastos tampoco estaba incluido con el consiguiente sobrecoste.

¿Cuánto tiempo?

En cuanto al factor tiempo, además de intentar cerrar una fecha de fin de obra, tienes que tener claro cuánto tiempo por encima del pactado tienes para continuar de obras. Puede ocurrir que te hayan prestado una casa que tienes que dejar en una fecha concreta, puedes estar alquilado en un apartamento por meses y por escaso días tener que hacer frente al pago de un nuevo mes… puedes estar pendiente del inicio del curso escolar, ya que donde te alojas durante la obra te es imposible acudir al colegio….

¿Cuánto agentaré?

En fin, que una vez más te recomendamos que seas previsor y tengas capacidad de improvisación ante el retraso de tu obra. Por cierto, que estos retrasos no solo tienen que ver con la velocidad del trabajo de los operarios, también hay veces que los suministros fallan. Todos lo hemos aprendido cuando un gran buque mercante se quedó atravesado en el canal de Suez provocando un monumental atasco de otros buques que desencadenó en retrasos de todo tipos de suministros, o simplemente que tu como propietario has decidió hacer mas obra de la inicialmente prevista.

¿Cuánto sobrecoste?

Y el sobrecoste… pues si, es una cosa muy habitual, pero hay que saber diferenciar entre un sobrecoste lógico derivado de pequeños ajustes de medición o partidas nuevas o imprevistas (de muy difícil previsión) y el sobrecoste del que quiere hacer negocio con los “imprevistos” del incauto.

Quizás de los presupuestos iniciales el mas tentador sea el más barato, pero compara concienzudamente que todos tengan incluidas las partidas necesarias para el buen desarrollo de la obra ya que a la sazón, el más barato puede terminar siendo una fuente de problemas y conflictos para ambas partes (contratista y promotor) ya que uno defenderá el no pagar por encima de lo que tenía previsto, y el otro quiere hacer bien la obra y por supuesto cobrar todo aquello que ejecuta. La planificación por ambas partes es lo más importante de una obra. Todo el tiempo que se invierte en planificar es tranquilidad de futuro.

Siempre es recomendable firmar el presupuesto inicial de obra, así como todas aquellas partidas nuevas que surjan y por supuesto ir midiendo a medida que se va desarrollando la obra.

Es habitual hacer un pago a cuenta al inicio de la obra, uno o varios pagos intermedios y dejar un torno a un 10% para el pago a fin de obra.

Por último, y mientras haces la reforma, ya sea viviendo dentro de casa durante su ejecución o ausentándote de tu vivienda, recuerda que para guardar tus objetos de valor siempre puedes contar con Grupo Inviam, donde podrás alquilar tres tamaños de caja y por el periodo que necesites; un mes, tres meses, seis meses…. Y todos ellos prorrogables. Además podrás acceder a tus objetos todas las veces que necesites de lunes a sábado.

 

Esperamos que os resulte de utilidad esta entrada y os esperamos en los siguientes que vendrán.

 

Saludos